ig43 ¿Cuándo es el tiempo de dejar tu iglesia?

En ig43 ¿Cuándo es el tiempo de dejar tu iglesia? Examinamos las condiciones en que uno debe salirse de tu iglesia para buscar otra.

En ig43 ¿Cuándo es el tiempo de dejar tu iglesia? Examinamos las condiciones en que uno debe salirse de tu iglesia para buscar otra.

¿Cuándo es el tiempo de dejar tu iglesia?

Por David Cox
[ig43] v2 ©2013 www.folletosytratados.com
Revisó: Luis Flores
Se puede fotocopiar e imprimir libremente este folleto

Completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa. Filipenses 2:2

Si eres un buen cristiano, te has relacionado con un grupo de hermanos de tu misma fe y práctica, te has integrado a sus actividades y has tenido compañerismo con ellos, y ahora no es fácil dejarles. Hay razones por las que a veces uno hace esto.

Es una decisión tomada por actitudes, prácticas y doctrinas en la iglesia, que te provocan no “sentir de lo mismo que ellos, no tener el mismo amor”, y estar separado de Dios y de la iglesia, de su doctrina y de sus prácticas porque no siguen la Biblia. Tal vez tú eres el problema, y esto es algo que, primero, uno debe resolverlo interiormente. Cuando estos pasos no brindan paz, debe uno orar y hablar con el pastor, y si esto no funciona, debe salirse finalmente, si es que no hay solución aceptable.



¿Por qué reunirse con una iglesia?

Antes de nada, necesitamos aclarar porque participamos en una iglesia. Uno no solo debe asistir a una iglesia, también debe participar e identificarse con lo que es. Hay obligaciones que van más allá de la pura asistencia, como orar por ellos, apoyar la obra de Dios que ellos practican, y ser formalmente un miembro y participante de la iglesia. Es pecado asistir sin ser totalmente parte y apoyo de la iglesia. En Romanos 10:9, Pablo nos enseña que somos salvos por una confesión pública de fe en Jesucristo. No es una obra, es una fuerte evidencia de tu confianza en Jesús como tu Salvador.

La comunidad de la iglesia es un don de Dios al pueblo de Dios. Somos miembros los unos de los otros (Rom 12:4-5), y somos unidos en Cristo (Efe 4:15-16), y esta unión espiritual forma la iglesia (su relación entre los miembros). Comemos juntos (Efe 4:4-5), llevamos nuestras cargas el uno al otro (Gál 6:2) y tal vez alguno se sacrifique demasiado por otro, (Hechos 4:32) vendieron casas para las necesidades de los demás en su iglesia local). Es una comunidad edificada sobre el perdón del uno al otro (Col 3:13), y en la que se manifiesta el amor de Dios de uno al otro (Juan 13:34). Esto es porque Cristo murió para formarla (Efe 5:25). El gran hecho de la muerte de Cristo, por el amor a nosotros, aparejado al amor viviendo entre los miembros, es lo que constituye el grupo de una iglesia verdadera.



¿Es correcto dejar tu iglesia?

Pablo también instruyó a Timoteo a esforzarse (2ª Tim 2:1), y encargar el evangelio a “hombres fieles que sean idóneos para enseñar a otros.” No se refería a hombres “perfectos” para enseñar, sino que estuvieran viviendo los principios que enseñaban, no gente hipócrita. También dijo, “procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse” (2:15). Pablo notó que la falsa doctrina “conducía más y más a la impiedad”.

También habló de los blasfemos Himeneo y Fileto que “carcomerá como gangrena” (2:16-17). Pablo dio el lema y estandarte de todo creyente: “Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.” (2:19). Al final, Pablo le mandó huir de los hombres seguidores de su pasiones juveniles, y mejor seguir la justicia, la fe, el amor, y la paz, “con los que de corazón limpio invocan al Señor.2ª Tim 2:22. No es aceptable retirar las normas o ignorar los mandamientos de Dios, si es que solo hay una iglesia en tu área. Aunque solo sea una, debes mantener las normas, y si carecen de buenas normas, entonces es mejor salirse, y formar una nueva iglesia o irse lejos en búsqueda de una buena congregación.



Razones para dejar a una iglesia

(1) Porque NO se predica la Palabra de Dios. Esto es, que no están exponiendo (explicando) las justas palabras de las Escrituras. Usan otra autoridad para el enfoque de sus actividades y discursos, diciendo profanas y vanas palabrerías que conducen a la impiedad (2:16). El fruto correcto de un buen ministerio bíblico es la piedad entre los que predican. Tanto en los que imparten como en los que reciben este ministerio. Se “desviaron de la verdad… trastornan la fe” (2:18).

Enseñando que la fe en Jesucristo es la meta de toda iglesia bíblica, y no son las finanzas, la grandeza, el control, o la gloria personal del líder. El contenido y dirección de un buen ministerio es enfocarse en la Biblia.

Judas 1:3 “me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos”,

Esta buena doctrina entregada a los santos es algo que tenemos que defender obligadamente. Esta es la salvación en Jesucristo, y la evangelización e intercesión para los inconversos y el amor y edificación entre los hermanos. «Iglesia» significa juntarse con otros cristianos a fin de cumplir la obra de Dios y edificarse espiritualmente. La base de esto es la misma convicción sobre la doctrina.

2ª Juan 1:9 Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo. 10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido! 11 Porque el que le dice: ¡Bienvenido! participa en sus malas obras.

Participar, bendecir, o asociarnos con personas que no utilizan la doctrina de la Biblia, es un gran error y pecado. 1ª Tim 5:22. El no enseñar la sana doctrina es una razón para no reunirse con ellos.

(2) Porque NO hay un verdadero enfoque en el arrepentimiento. Cada creyente debe estar marcado por sus esfuerzos en seguir a Dios, y por su actitud de dejar el pecado para andar en la justicia de Dios. Todas las iglesias están compuestas de individuos que son pecadores, aun salvos, pero todavía son pecadores.

1ª Juan 1:8 dice que lo somos (Juan escribió a creyentes) engañados, decimos que Dios mentiroso si no admitimos que somos pecadores (epístola escrita a creyentes). Pero la marca de una buena iglesia debe moverse en un ambiente de reprensión, reproche y denuncia del pecado, y que los miembros de esa iglesia dejen el pecado. Nadie va al cielo sin la piedad (Heb 12:14), y la iglesia es compuesta de verdaderos cristianos que se esfuerzan a vivir como Cristo su Salvador.

Tal vez el problema más frecuente por el que las personas dejan una iglesia es el pecado no atacado por la misma iglesia. Los ministros tienen mucha culpa, el pastor principalmente. Si él no reprende el pecado que hay entre la iglesia, no está haciendo bien su trabajo. Si se permite a que un ministro siga actuando así, cuando tiene graves pecados y no muestra un espíritu de arrepentimiento, lo recomendable es cambiar de iglesia, dejar el pecado y vivir fielmente. No es aceptable ni correcto a los ojos de Dios si no ejercen su ministerio bíblicamente (“el que lucha como atleta, no es coronado si no lucha legítimamente2ª Tim 2:5). Es muy importante que tu pastor (y los ministros) cumplan siempre con los requisitos para un obispo (1ª Tim 3:10-15. Ser amable) llevar una vida limpia (sexualmente), no ser codicioso de dinero, tener un buen testimonio, no ser hipócrita (1ª Ped 5:1-3), Etc. No cumplir fielmente con sus responsabilidades, son razones más que sólidas para ser removido del ministerio.

Aprendemos moralidad por la instrucción de la Palabra de Dios a través de predicadores que viven lo que enseñan. Si no enseñan la Biblia bien, o no viven estas normas personalmente, de todas maneras aprendemos de ellos, pero no la moralidad de Dios, sino ¡su hipocresía!, mejor ¡Aléjate de ellos!



La Libertad del Creyente

Gálatas 2:4 y esto a pesar de los falsos hermanos introducidos a escondidas, que entraban para espiar nuestra libertad que tenemos en Cristo Jesús, para reducirnos a esclavitud, 5:1 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud. 13 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.

Probablemente, el factor más común entre la gente que deja una iglesia, es por observar que la libertad cristiana de Dios, empieza a convertir a la iglesia en una secta controladora. Como dice Pablo en Gálatas 2:4, el falso profeta quiere reducirnos a esclavitud. En Hechos 20:29-30, Pablo otra vez nos indica que el lobo rapaz habla argumentos torcidos (“perversos”) “para arrastrar tras sí a los discípulos”. En el plan Divino, cada hermano adora a Dios al servirse uno al otro. La consciencia cristiana es lo que debe motivar al cristiano en sus acciones y servicio, no a base de métodos psicológicos. El lobo usa tácticas de manipulación, y se esfuerza en poner a las personas en contra de sus propias consciencias y voluntades para servir a él en lugar de servir a Dios y a sus hermanos en Cristo. Si esto no nace naturalmente bajo las enseñanzas de la Biblia, los predicadores fallan o son falsos profetas.



No hay amor.

En Hechos 20:29, Pablo describe a los lobos como personas “que no perdonarán al rebaño.” El obedecer la fe enseñada por los apóstoles es la marca de fidelidad. En 1ª Timoteo 6:3 Pablo nos revela que la sana doctrina siempre produce piedad. El amor y el perdón entre los hermanos son también marcas fieles de la salvación.

1ª Juan 4:1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo. 6 Nosotros somos de Dios; el que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. En esto conocemos el espíritu de verdad y el espíritu de error. 7 Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. 8 El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.

Reconocemos al hombre de Dios en su contraste con el falso profeta, y por su profundo amor y servicio que manifiesta hacia a los hermanos en Cristo (Mat 21:34). Su vida y su ministerio están entregados a promover ese amor de servicio de uno por otro (no a él mismo) entre los hermanos.



¿Cómo debo salirme?

Debe haber una relación formal entre tú y la iglesia (normalmente es la membresía), y cuando abandonas esa iglesia, debes romper la relación formal que existe entre ambos. Debes avisarles de tu decisión y el motivo por el cual los estás dejando. Normalmente, la manera más simple y más irresponsable es no llegar más a la iglesia, pero esa no es la forma correcta de hacerlo. Si existen razones por las que estás saliendo, deben ser lógicas y bíblicas (con textos que apoyen tu decisión).

Debes expresar estas razones al líder (el pastor) de la iglesia. Si el pastor es el problema, entonces tal vez sea prudente dejar saber las razones a los diáconos u otros ministros y líderes. Tal vez no sea prudente discutir los asuntos con toda la iglesia (nunca te adentres en chismes). Pero sí debes informarlo por lo menos al equipo de liderazgo de la iglesia.



Download “ig43-cox-cuando-dejar-tu-iglesia-v2” ig43-cox-cuando-dejar-tu-iglesia-v2.pdf – Downloaded 407 times – 111.63 KB

Más Folletos desde la Categoría