Meditaciones para Comunión #2
Por David Cox
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Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí. Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos duermen. Si, pues, nos examinásemos a nosotros mismos, no seríamos juzgados.
1° Corintios 11:29-31
La Cena del Señor es un servicio donde cada cristiano debe acercarse a Dios. Este acercamiento no viene nada más por estar en un servicio, sino es porque nos examinamos a nosotros mismos para reconocer, arrepentir, y quitarnos los pecados que tenemos, y de rectificar lo que está mal en nuestras vidas. Este folleto está hecho para ayudarnos meditar sobre diferentes aspectos de la vida antes de participar en la cena del Señor. El punto es de pensar seriamente en lo que Dios ha dicho, y corregir delante de Dios lo que nos falta.
Tabla de Contenido
La Salvación
Habacuc 3:18 Con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación. ¿Es el gozo de mi vida mi Dios, mi Salvador, mi salvación? ¿Realmente estoy animándome en Dios y las cosas de Dios?
Salmo 81:1 Cantad con gozo a Dios, fortaleza nuestra. Parte de nuestra relación con Dios es de regresar a Dios gracias por lo que Él es para con nosotros. El cantar en la presencia de los hermanos en la iglesia es la forma de expresar esta gratitud por nuestra salvación. Debemos tener profundo gozo por nuestro Dios y “nuestra fortaleza”. ¿Estamos siempre tristes y moribundos por que no vivimos el gozo que debe tener un hijo de Dios?
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Mi Vida Espiritual
1° Juan 2:3-6 Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos. El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo. Nuestra relación con Dios es una relación con la voluntad y placer de Dios. Debemos entender que no podamos decir que tenemos una buena relación si no buscamos a obedecer a Dios en toda nuestra vida. Es algo muy hipócrita de decir que somos cristianos y luego no obedecer lo que Dios quiere de nosotros. Este pasaje propone que el conocer a Dios es lo mismo de guardar a sus mandamientos. Los dos no se pueden separar. La verdad de nuestra relación con Dios se ve en como andamos en el mundo. ¿Guardas sus mandamientos? ¿Pones el modelo de tu vida en la vida de Jesucristo? O sea, ¿Cómo Jesús hizo su vida, así haces tu vida? Debemos tomar en serio nuestro nombre, “cristiano”, o sea, un pequeño cristo. ¿Los demás pueden ver Cristo en mí? ¿Ven un carácter carnal y sucio, o un espíritu bonito y como Cristo nos presentó? Debemos anotar que Cristo fue muy rudo con el pecado. No lo toleró. Se enfrentó el pecado con la ira de Dios. Pero a la misma vez tenemos que anotar que tierno y suave, con eterna paciencia y compasión para el pecador. Tenemos que separar en nuestras mentes la diferencia entre el pecador y el pecado. El pecado es nuestro enemigo, pero el pecador es un prisionero que es nuestro deber de librar. Con la salvación y Dios podemos. Pero esto no es posible si nosotros mismos causamos problemas por nuestras vidas pecaminosas, y no vivimos en el ejemplo de Cristo.
Mi Salvador
Salmo 2:12 Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino; Pues se inflama de pronto su ira. ¿Estamos poniendo prioridad y honor a Jesús en nuestras vidas? ¿En qué forma? ¿Ponemos las actividades relacionadas con nuestro Salvador primero sobre todo? ¿Buscamos con todo nuestro corazón la voluntad de Dios? ¿Recordamos que Dios se enoja cuando no le honramos? Su enojo puede causarnos castigos a nuestras vidas por que menospreciamos a Dios por tratarle en una forma indigna para quien que es Él.
Mi Testimonio
1° Pedro 3:15-16 sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros; 16 teniendo buena conciencia, para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, sean avergonzados los que calumnian vuestra buena conducta en Cristo. ¿Estamos preparándonos para dar razón de nuestra salvación a otros? ¿Pueden ver una diferencia entre nosotros y el mundo? O ¿Somos igual del carácter pecaminoso como el mundo?
Mi Pareja
En el libro de Cantares, Dios presenta la situación entre una pareja que demuestra amor uno por el otro. Se va buscando su pareja por su profundo amor. Es muy triste que muchas parejas nunca tengan suficiente contacto físico, afecto, y atención antes de casarse, para carecer totalmente después todo tipo de afecto y atención. Novios no pueden dejar de tocar uno al otro, y después, alguien tiene que ordenarlos de hacerlo cuando son parejas. ¡Qué triste!
Mi Familia
Efesios 6:4 Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor. Dios dio a los padres la responsabilidad para sus hijos. Aunque muchos padres rechazan la obligación delante de Dios de entrenar a sus hijos, Dios dice claramente que somos obligados a hacerlo. Es disciplina. Muchos padres no quieren disciplinar a sus hijos. Usan distracción en lugar de entrenamiento. No dicen claramente que algo es malo, o que el niño tiene reglas que tiene que seguir. Tienen miedo del niño, y no quieren ofenderle o enojarle. Pero estos padres necesitan entender que es Dios que no debemos ofender o desobedecer. “Criar” tiene la idea de poco a poco va cambiando para el bien. No es nada más pura regla, sino hay amonestación también como parte del entrenamiento. Esto es de espiritualmente enseñar lo que es correcto, y lo que no es correcto. Esto es solamente por que el padre lo sabe por parte de sus estudios en su propia vida espiritual. Igualmente dice este versículo que como padre, no debemos provocarle a ira. La idea aquí es de ser consistente con las reglas, premios, y castigos. De ser voluble es de frustrar al niño. De imponer reglas que nunca cambian es de formar una estructura que da firmeza y estabilidad al niño.
Mi Relación con otros
Gálatas 5:14-15 Porque toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. 15 Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros. Nuestra relación con Dios se ve muy fácilmente en nuestra relación con otros. El amor de Dios debe brilla de nuestros corazones hacia a los demás que tenemos contacto. Pablo puso los dos versículos juntos. El amor no es de atacar y tener agresividad hacia a nuestro próximo. No es de “acabar con ellos.” Es de causarles bien. De ser una bendición a ellos.
Mi Relación con mis Hermanos en Cristo
Gálatas 6:10 Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe. Dios nos manda de ser ricos en buenas obras. Pero con quien que hacemos buenas obras no es igual con todos parejo. Nuestra primera prioridad es con nuestra propia sangre y carne, pero después de esto, debemos ser amables y siempre haciendo el bien con la familia de la fe. Esto es muy dependiente sobre las oportunidades que se presentan. O sea, siempre debemos buscar y ser atentos de la vida de nuestros hermanos en la fe, y responder cuando tienen necesidades, problemas, tristezas, o gozo. Debemos estar listos y prontos de actuar cuando se presenta algo.
Mi relación con la Obra de Dios
1° Corintios 16:15-16 Hermanos, ya sabéis que la familia de Estéfanas es las primicias de Acaya, y que ellos se han dedicado al servicio de los santos. Os ruego que os sujetéis a personas como ellos, y a todos los que ayudan y trabajan. Pablo hizo un comentario sobre esta familia. Ellos habían agarrado la enseñanza bíblica de servir a los santos. Pablo hizo el comentario que debemos sujetarnos a ministros que son como esta familia. Pablo propuso tres calidades que debemos buscar en una iglesia o ministerio. Si lo encontramos debemos sujetarnos a este grupo. (1) Que sirvan. (2) Que ayudan. (3) Que trabajan. Muchas iglesias hoy en día no sirven. El servicio a los santos es algo que es perdido por otras cosas “más importantes.” Tenemos que entender que Dios impuso en nuestra vida cristiana hermanos con problemas. El servir a ellos es parte de qué hace la vida cristiana poderosa. La preocupación por las necesidades y problemas de otros es algo que jala la atención.
Debemos ayudar a nuestros hermanos. A veces hay hermanos que hacen mucho pero ayudan nada. Causan más problemas en las vidas de los demás que ayuda. Parte de tener el Espíritu Santo, y ver Su fruto en nuestras vidas es cuando queremos las vidas de otros de ser bonita, placentera, y buena. De querer esto y de efectuarlo en la forma que podamos es de ser lleno del Espíritu Santo.
También debemos ver grupos que tienen líderes que trabajan. Que tristes es de ver líderes flojos. Siempre toman el camino de menos trabajo, menos opresión, y menos duro. Esta es la naturaleza humana, carnal y floja. Cuando vemos ministros que se dedican a la obra, trabajando con fatiga día y noche, debemos acudirnos a ellos y apoyarles con todo que podamos. 1° Tesalonicenses 2:9 Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios.