doct111 ¿Cómo puede el Dios de Amor Condenar a Alguien al Infierno?

doct111 ¿Cómo puede el Dios de Amor Condenar a Alguien al Infierno? Explica el balance entre Dios amando y porque castiga cuando Su amor es despreciado. Por David Cox

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Efesios 2:4 Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, 5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),

Si entendemos que la esencia de Dios es amor, esta pregunta es lógica. Pero el asunto es que no entendemos qué es este amor, ni conocemos bien a Dios. Dios es amor, pero Dios no ama todo lo que hay. Lo que no ama son cosas contra Su naturaleza. Su amor sigue Su compromiso, y esto es lo que es bueno, no lo malo, no lo dañino. Como Creador de todo, es Juez, y tiene que castigar lo malo, y a los que siguen y promueven lo malo.

La salvación no es como cuando un niño regala la envoltura de un dulce a su hermano. Aunque es un regalo no tiene valor. La salvación vale muchísimo. Todos los que llegan al infierno son personas que despreciaron a Dios y a esta salvación tan grande.

Envuelto en este asunto está el precio que le costó a Jesús, y también el bien que la salvación nos trae.

Salmos 49:8 (Porque la redención de su vida es de gran precio, Y no se logrará jamás),

¿Qué significa “Dios es Amor”?

2 Tesalonicenses 1:8 en llama de fuego, para dar retribución a los que no conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo; 9 los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder, 2:10 y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.

Unos quieren definir el amor según sus entendimientos. Pero el amor es un concepto espiritual y eterno (Jeremías 31:3; Salmo 103:11 para “los que le temen”). Unos, definen que Dios es amor, con que Dios es tolerante, y tolera todo y cualquier cosa. Dicen que Dios es misericordioso, entonces este concepto excluye cualquier condenación.

Isaías 54:8 Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento; pero con misericordia eterna tendré compasión de ti, dijo Jehová tu Redentor.

Considera este versículo y ¿a quién se refiere? ¿A todos, o solamente a los salvos? No todos van al cielo. Solamente los que con Jesús el Salvador tienen una relación. Esta relación empieza con la confesión del pecado de uno, y el arrepentimiento. Pero la fe en Jesús es la confianza en Él. De la parte del redimido, demuestra práctica consistente de creer en la persona de Dios, en Su persona, en Su carácter moral, y en andar en Su voluntad. Aun con los redimidos, Dios disciplina a Sus amados, porque nuestros caminos y vidas nos dañan a nosotros mismos, y Su amor corrige esto.

Hebreos 12:11 ​Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados.

Disciplina no es agresión para causar al disciplinado sufrir, sino que es para su último bien, para protegerle del daño de su mala conducta.

El concepto de amor es más fuerte que los caprichos de los individuos. Considera la situación. ¿Es amor si la esposa encuentra que, mientras que su marido está casado con ella, se casa y tiene hijos con otra mujer ? ¿Cual debe ser la reacción de la esposa en tal situación? ¿Debe perdonar a su marido, aunque no deje de ver a la otra y siga teniendo relaciones sexuales con ella? ¿Este es el amor perfecto y verdadero? O sea, este amor es muy insuficiente, defectuoso, muy manipulado para los caprichos de malas personas que quieren abusar y no hacer el bien.

El amor no existe si no es bidireccional, de las dos partes. Igualmente, el amor es exclusivo en una forma, y en otra forma si es abierto. Por ejemplo, un marido puede al mismo tiempo amar a su esposa y a sus hijos sin sin que sea un conflicto. Pero en ninguna forma puede tener el afecto correcto para dos esposas. El amor es exclusivo.

El amor es lo opuesto del desprecio, y el desprecio es lo opuesto al amor.

1 Juan 4:7… Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios.

Nuestro entendimiento del amor, nuestra definición, “mi sacrificio por tu beneficio” tiene que incluir algo. La parte, “mi sacrificio” debe ser algo de mucho valor. El sacrificio implica valor, y en la salvación, es de gran valor. Por ser valioso, el sacrificio no debe ser despreciado, sino debe haber gratitud expresada. El amor verdadero tiene la prioridad en el bien eterno del amado, más que lo que es conveniente al momento.

La Salvación es Preciosa

1 Pedro 1:18 sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir… no con cosas corruptibles, como oro o plata, 19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,

Hay un alto contraste entre lo que llevamos nosotros a nuestra salvación (nada), y lo que llevó Cristo. El valor de la salvación realmente no tiene nada de ver con lo que uno quiere o necesita, sino en que el sacrificio es valioso en sí. Nuestra “manera de vivir” era vana, sin valor para la eternidad.

“Preciosa” significa que, aún no estimado tanto por nosotros, es de un valor imposible de valorar correctamente. Es caro, de mucho valor. La sangre de Cristo es mucho más valiosa que el oro o la plata. Los salvos no estiman su salvación suficientemente, porque, según su alto valor, deben tomar la salvación muy seriamente. Los inconversos menosprecian la salvación. Si examinamos a los ricos por un momento para comparar, ellos valoran altamente sus riquezas. Aseguran sus riquezas por mucho esfuerzo y energía, siempre analizan cualquier parte de su vida con su preciosa riqueza, porque no quieren que un acto no bien pensado pueda mal afectar su precioso tesoro.

“Sangre” se refiere a este alto valor e igualmente su forma de pagarlo, lo cual es por la muerte de Jesús. Para efectuar nuestra salvación, nuestro pecado tuvo que ser impuesto sobre Cristo. Es porque Dios no acepta el pecado. La misma norma que nos causa a ser condenados por nuestros pecados es echado sobre Jesús para salvarnos. En sí, este punto es inexplicable. Pero pone el valor de la sangre de Jesús, de lo que tuvo que hacer para efectuar nuestra salvación, es algo muy importante, aunque el ser humano menosprecia esto.

El Costo de la Salvación

Juan 14:6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

Hechos 4:12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.

Parte del costo de la salvación son los elementos que llegan a ser condiciones. Primero, la salvación es solamente por medio de El Salvador, que es Jesús.

Juan 1:12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;

Esto es de recibir a Jesús por fe. Este recibir y creer es de tener confianza en Él, y aceptar como verdad lo que nos dice.

1 Juan 2:17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.

A la vez que la fe salva, esto es más que aceptar verbalmente las palabras de Dios. El recibir a Jesús es de integrarnos con la voluntad de Dios. O sea, recibimos al Mensajero de Dios (Juan 1:1 Jesús es el Verbo), pero más que algo de estar de acuerdo verbalmente (Romanos 10:17), “hacemos” la voluntad de Dios en que recibimos a Jesús.

Efesios 2:8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; Efesios 2:9 no por obras, para que nadie se gloríe.

Segundo, la salvación es solamente por medio de la fe o el creer en Dios, específicamente en Jesús y Su obra en la cruz.

El tercer punto en el costo de la salvación es que Jesús, siendo parte de la trinidad, la comunión de las tres personas, Jesús fue temporalmente separado del Padre para efectuar la salvación para la humanidad.

Marcos 15:34 “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?”

Finalmente, ¿qué es una salvación barata? Esto es una salvación que no cuesta mucho. Muchos cristianos piensan que pueden ser salvos por simplemente ir a la iglesia unas pocas veces al año, pero no piensan más de Dios o de su salvación. No estiman altamente su salvación. Su salvación no entra mucho en sus vidas. Pero el justo (el verdadero salvo) vivirá por su fe (Habacuc 2:4; Romanos 1:17; Gálatas 3:11; Hebreos 10:38). Quiere decir que constantemente y en toda su vida, su salvación y su Salvador tienen interacción con las decisiones de su vida. Cómo viven su vida.

El Bien que nos Trae

1 Corintios 2:9 Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman.

Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

El salvo no va al infierno (no está bajo la ira de Dios), sino que tiene la vida futura segura en el cielo, y esta vida está espiritualmente en él aquí, en la tierra, dándole beneficios en el presente. Envuelto en esto está el perdón de nuestros pecados (Efesios 1:7) y el tener paz con Dios (Romanos 5:1). Esto incluye de ser adoptado a la familia de Dios (Juan 1:12). El Salvador vive actualmente dentro de la vida del salvo y esto es su esperanza de entrar al cielo.

Colosenses 1:27 a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria.

2 Corintios 5:17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

El pecado es la maldición que destruye nuestras vidas en el presente. La salvación cambia el pecado, quitándolo y poniendo la justicia de Dios en su lugar, que nos trae bendiciones. Romanos 6:14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. Cada pecador es un esclavo del pecado. Con recibir la salvación, la persona es librado de esta esclavitud. La forma en que Dios hace esta transformación es por el Espíritu Santo (el espíritu que causa la santidad, de no pecar y hacer lo correcto) que mora dentro del cristiano desde el momento en que cree para ser salvo. Estamos unidos con Cristo, somos parte de Su cuerpo (1 Corintios 12).

Con la salvación viene el don de la oración eficaz. Hebreos 4:16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. O sea, siendo adoptado en la familia de Dios, Dios escucha nuestras peticiones como un Padre amado. Nos escucha más y más, y quiere obrar en nuestras vidas con nuestros problemas.

Despreciando el Evangelio

1 Pedro 2:7 Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso; pero para los que no creen, La piedra que los edificadores desecharon, Ha venido a ser la cabeza del ángulo; 1 Pedro 2:8 y: Piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; a lo cual fueron también destinados.

Si una persona pone cien mil pesos en efectivo en una caja, y trata de regalarlo a alguien que está muriendo de hambre, y le dice lo que es, y la persona no lo quiere. La persona hambrienta tira la caja al piso y se va enojado. ¿Cómo reaccionará la persona bondadosa? Va a enojarse con tal persona. No recibe el regalo muy necesario por su orgullo, por ignorancia, o por ser sonso.

Dios nos regala la salvación, y aun regalada, la mayoría de las personas la rechaza. Piensan que otras cosas en la vida son de mayor importancia.

Ven la Salvación como algo Necio o Vano

1 Corintios 1:18 Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios. Para ser salvo, la persona necesita discernimiento espiritual. 1 Corintios 3:19 Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios; pues escrito está: El prende a los sabios en la astucia de ellos.

“Locura” La idea es algo que no hace sentido. Dios lleva a cada persona individualmente en lo de la salvación. Si una persona piensa que la salvación es una locura, es necio, entonces esta persona está rechazando la persona de Dios, y al final, va al infierno.

Aunque Dios es amor en Su esencia, es muy brusco con la persona que rechaza este buen amor. Salmos 14:1 Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, hacen obras abominables; No hay quien haga el bien. La vanidad es algo que no respeta ni tiene consideración de la eternidad. El necio junta la vanidad en su vida. Para la eternidad, no tiene interés. Piensa que todo lo que hay, todo lo que importa, está en este mundo ahora, y esto es riqueza, bienestar aquí.

El Desprecio del Evangelio

Proverbios 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanz.

Un “insensato” es alguien que le falta la sensatez, o el buen juicio, la prudencia, la sabiduría. No logra reflexión, madurez, cordura. Su pensamiento realmente no es racional ni lógico.

A fin de cuentas, es la decisión de cada uno. Pero las consecuencias son eternas, y esta persona es quien que va a sufrir o se va a beneficiar si hace su decisión buena o mala. Mateo 10:14 Y si alguno no os recibiere, ni oyere vuestras palabras, salid de aquella casa o ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies.

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